jueves, 3 de mayo de 2012

El Real Madrid gana la Liga y... ¿Cristiano Ronaldo pierde?


El Real Madrid gana su Liga número 32 y Cristiano Ronaldo perdía por un gol su carrera hacia el Pichichi/Bota de Oro, de momento. Falló un penalti y erró un mano a mano. 'Sólo' pudo marcar un gol en San Mamés para sumar 44, uno menos que Messi. Por sus gestos y su rostro, parecía que estos datos le importaban más que su triunfo liguero. Su carácter cabalga entre lo ambicioso y lo codicioso y ante el Athletic Club se pudo ver una vez más.

A raíz del tirón de orejas del Santiago Bernabéu esta temporada y su posterior charla con Zidane, Cristiano Ronaldo se había vuelto más amable en el juego colectivo. Más participativo en las celebraciones de sus goles y menos egocentrista. Sin embargo, en Bilbao hubo gestos que volvían a dibujar a un personaje individualista y que sólo piensa en sí mismo.

En el gol de Ozil, Cristiano no lo celebró (era el que prácticamente aseguraba el título de Liga) y tuvo que ser el alemán quien corriese hacia la posición de Ronaldo. Sin embargo, con el tercer gol, nadie abrazó a Ozil (autor del pase) y sí al rematador: Cristiano. Además, durante el partido cometió un par de pérdidas de balón y fallos en algún disparo que le dejaron 'knockout' en la jugada posterior. ¿Por qué se borra así del partido durante unos instantes?

Cierto es que debe soportar más insultos y provocaciones que ningún otro futbolista (aquí La Catedral me ha defraudado), pero no por ello debe olvidar que el escudo de su camiseta implica estar por encima de cualquier circunstancia. No debió recordar a San Mamés con sus gestos que habían ganado la Liga y ellos (el Athletic Club) no, al igual que tampoco debió hacer un corte de mangas a Javi Martínez (por mucho que este increpara al portugués) al final del encuentro. Hay cosas que están por encima y más un día en el que se logra una victoria histórica.

Su entrenador Jose Mourinho, siempre ha defendido a Ronaldo tal y como es. Quizás porque también comparte ciertas actitudes. Y es que el técnico blanco hizo un gesto mostrando siete dedos que representan sus campeonatos de Liga ganados. Que se sepa, los madridistas celebraron en la fuente de Cibeles el título número 32 de su equipo, no el séptimo de Mourinho. Hay veces que los gestos desnudan las prioridades de cada uno. (laciudaddeportiva.com)